viernes, 21 de enero de 2011

tu cuarta parte



Pero hoy te encuentro después de nuestro episodio que aconteció al doceavo año que nos conocimos, un poco más maduros, más nerviosos, y con más razones para dejar que las cosas pasen como tienen que ser, porque ya estamos grandes.
Y te reclamo, te grito groserías, si porque las mereces, y porque yo tengo derechos, ¿no te gustó escuchar lo que te dije?  ni modos así es la verdad,  soy dueña de mis palabras, soy responsable, si me acusas, y no me importa, así soy, así somos querido.

Tengo derecho de decirte que eres un pendejo, porque en nombre de nuestros trece años, esas cosas no se hacen, porque en nombre de nuestra amistad, por la cual ya habíamos firmado una tregua y un olvido, no merecía tu vida oculta. Si tú y yo nos conocemos, si tú y yo podemos descifrarnos sin vernos. 

Esta bien que ya no seas el niño bueno que conocí, del que me enamore cuando era niña, esta bien que ni siquiera me ames, porque yo tampoco lo hago, esta bien que seamos adultos, y acepto que tengamos secretos, pero lo que no acepto es el significado que le das a la palabra usar.

Si es mi versión de los hechos, tranquilo si no me enojo nada más me emputo, no entiendo en que parte de tu vida, comenzaste a pensar que soy una de las tantas niñas tontas que has hecho tus novias.
Te grito en mis palabras: soy yo, la misma que conoces desde hace trece años, la chica lista, prepotente, fría, que quiere que las cosas se hagan a su manera, caprichosa, rebelde, si, si, esa soy yo, ¿no te acuerdas?? Si esa misma que no tiene sentimientos, esa que un día te mando a volar tus sueños pubertos, esa que quemo tus cartas, poemas, rosas y sentimientos, esa que te rompió el corazón.

Si te digo que no me enojo porque me haya dolido el corazón, me dolió el concebirme tonta…. Ahora te haces el ofendido…  y te vas… huye, de nada vale, ya has oído todo lo que había por decirte, 
Tal vez ni siquiera es un reclamo… sólo pasa que me siento libre de poder decirte lo pensable, sin medir mis palabras… ya no eres dueño de mi respeto, lee con atención lo sabido por ti, eso eres… lee entre líneas, indirectamente, sé que te cuesta, porque tú a diferencia de mi, ya no eres tan inteligente!! 

me dio flojera escribir las partes intermedias de esta historia, tú comprenderás, ¿no?, bueno me dio flojera insaciable, describir los   trece años, ya hasta la tinta de la pluma se agoto y me rehuso a comprar otra, no mereces ese gasto de dos pesos por una BIC. 
que te sea leve la cruda moral... 

No hay comentarios:

Publicar un comentario